Un regalo para mis papeles.

Hoy quiero mostraros algo que no he hecho yo. El mérito es de mi marido.
Hace tiempo que necesitaba un soporte adecuado para mi colección de papeles, ya que estaban colgados en dos barras, claramente insuficientes para la cantidad de pliegos que tenían que soportar. Cuando quería sacar un papel era muy frecuente que los que estaban encima acabaran desparramados por el suelo.
Así que le explique a mi marido lo que quería, y él, que disfruta tanto trabajando con madera como yo haciéndolo con papel y cartón, se puso manos a la obra. Creo que a su buena disposición contribuyó el hecho de que estaba harto que le despertara cada vez que quería un papel ( la habitación donde los guardaba era la misma en la que él suele dormir la siesta). Ahora están en otro lugar de la casa donde no molesto a nadie.
Estoy encantada con el resultado. Los he ordenado por temas y el acceso a ellos es sumamente fácil al tratarse de un sistema abatible. Plegado, como veis, no ocupa casi nada.